Un verano para recordar…

Septiembre 2025

Este verano ha sido mucho más que sol y vacaciones. Ha sido una colección de experiencias compartidas, de risas, chapuzones y momentos que quedarán grabados en el corazón de cada niño y adulto que formó parte de esta maravillosa andanza.

En estos meses de verano, el grupo de voluntarios de excursiones (GVE) nos hemos empleado a fondo para llevar a los chicos y chicas de las residencias infantiles Villa Paz y Vallehermoso a disfrutar de toda la diversión posible.

Hasta tres veces nos lanzamos a la aventura en Aquopolis Madrid, donde los toboganes se convirtieron en autopistas de alegría y las atracciones nos hicieron gritar de emoción… los chicos incansables pedían ir de una a otra, «a ésta que es más alta y se va más rápido«, «ahora a la piscina de olas«. Cada visita fue distinta pero todas igual de mágicas e inolvidables.

También nos sumergimos en la tranquilidad de la piscina, realizando otras tres visitas al «Club Deportivo Somontes», allí entre juegos, flotadores y meriendas al sol descubrimos que no hace falta mucho para ser feliz, sólo buena compañía y ganas de pasarlo bien, se nos iba el tiempo volando y lo único que queríamos era que durara un poco más…

Y cómo olvidar el día que pasamos en el pantano de San Juan rodeados de naturaleza! El agua nos recibió con su frescura y el paisaje parecía sacado de un cuento. Al principio a los pequeños les daba «miedito» meterse en el agua, pero acompañados de los mayores desaparecieron las dudas y “al agua patos”, y así saltamos, jugamos, nadamos, exploramos, nos pusimos retos y nos sentimos libres en aquel marco incomparable.

Ahora que ya vamos guardando los bañadores y las chanclas, sentimos esa mezcla de alegría y nostalgia: alegría por lo vivido, por tantas sonrisas y la amistad fortalecida, y nostalgia por este verano que se despide. Ahora toca volver al colegio, a los libros y a las obligaciones de cada uno. Pero no lo hacemos con tristeza, porque sabemos que lo mejor de todo esto no ha sido ni el agua ni el sol, sino las personas, que seguirán con nosotros. Los chicos vuelven al cole con las mochilas llenas de recuerdos, de momentos felices y con la certeza de que nuevas aventuras les esperan.

Gracias a todos los que hicieron posible este verano. A los niños por su alegría y energía contagiosa, a los voluntarios por su dedicación y el cariño puesto en cada actividad y a muchos otros que de forma anónima contribuyeron a que todo esto se hiciese realidad. ¡¡Hasta la próxima aventura!!

Humberto, voluntario de Acción Familiar

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